viernes, 22 de febrero de 2008

¡Más de 300...¡

En lo que llevo de obra en mi "nueva casa" llevo hechas, contando las que he hecho esta tarde mientras intercambiaba unas frases y unas risas con los albañiles, 339 fotos.

Desde que estaba el solar limpio y liso, pasando por los primeros trabajos de una excavadora, cimentaciones, subidas de muros, construcción de pilares, echadas de hormigón en los techos, bovedillas, vigas, nuevas subidas de pilares, más techos, más hormigones, maderas del techo, tejado, paredes laterales...¡todo, fotograma a fotograma¡ La historia completa de la construcción de una casa.

Paso a paso, momento a momento, sé todo lo que se ha hecho y se sigue haciendo en mi casa, y todo, con fotos en primeros detalles, primeros planos, fotos de conjunto, etc.

¡Y lo que me falta todavía¡

Pero he de decir, en honor de la verdad, que va a quedar una casa que va a llamar la atención. De hecho ya la está llamando. El albañil se está pegando una buena trabajada en la fachada de la misma. Los detalles que está poniendo, lo fino que es en su trabajo, y lo bien armonizado que está quedando en su conjunto, hace que la gente que pasa por delante de la obra vuelvan la cabeza hacia esos detalles ornamentales que está poniendo en sus fachadas.

Esta tarde, cuando bajaba de la obra por una escalera de mano hasta la planta baja y después de hacer las fotos que he comentado, he visto, a través de una de las ventanas del piso inferior, a un señor de mediana edad apoyado en la fachada de la casa del otro lado de la calle, mirando toda la obra, girando la cabeza de un lado a otro, mirando todos y cada uno de los detalles: su pierna derecha doblada y apoyada la planta del pie en la fachada de la casa, los brazos cruzados sobre el pecho y la cabeza echada hacia arriba mirando todo con detenimiento...¡Me ha llenado de orgullo, qué leches¡.

Me estoy gastando una buena pasta gansa pero mi señora está ilusionadísima, y eso ya es, para mí, motivo más que suficiente para justificar todo el gasto. Y si a eso añadimos que mis dos hijas también están ilusionadísimas, entonces ya sí que no hay nada que decir: ¡¡La casa se hace y punto final¡¡. Y si, además y como parece ser, va a ser la admiración del lugar, entoncesssssssss....¡¡uuuffffff¡¡¡¡

Bueno, me voy a ver a mi señora un rato que, como cada tarde, se ha subido a su estudio a pintar.

Feliz fin de semana.