viernes, 21 de mayo de 2010

Golondrinas


Esta mañana, durante unos minutos, me he llenado de tranquilidad y paz.

He salido con mi perrita a pasear, a eso de las 8:45h. de la mañana, como todos los días. El cielo estaba totalmente azul, de un azul brillante y que casi hacía daño a los ojos. El aire estaba totalmente calmado y la temperatura cálida, suave, acariciadora...

Las golodrinas, a cientos, volaban en ese momento por encima de mi cabeza, a muy escasos metros, con sus rápidos vuelos, sus trinos, sus giros vertiginosos en cualquier dirección...y en la calle y donde yo me encontraba, a esas horas de la mañana, ni un solo ruido. Sólo se oía el piar nervioso de esas golondrinas volando casi en vuelo rasante.

Y en ese momento me ha entrado la paz, el sosiego, el relax, mirando a esas aves girar en el espacio, en el silencio de la calle, en la calidez del ambiente matutino...Hasta mi perrita se giraba, de vez en cuando y hacia arriba, mirando los veloces giros y los trinos de las golondrinas, y lo hacía moviendo su cabeza, atenta, de derecha a izquierda y vuelta a cambiar. Y así hemos permanecido durante unos minutos, hasta que hemos vuelto, al fin, de nuevo al hogar.

¡Qué grande es lo simple¡