Hacer el Amor

Dicen, los que más saben, que hacer el amor es cosa sana, pero que es más sano una vez a la semana. Unos lo llaman "hacer el amor" y otros lo llaman "follar". Bueno, todo son opiniones y todas las opiniones son opinables.

De joven, estarías todo el tiempo "pegado", pero la inexperiencia no te deja disfrutar todo lo que quisieras.

En la edad madura, estarías también todo el tiempo "pegado", lo que pasa es que las circunstancias de la vida mandan y no estás todo lo pegado que quisieras. Aquí, en este grupo, la experiencia es un grado y, las pocas veces que te quedas agarrado lo haces intensamente y con sabiduría.

Y ya en la edad del higo chumbo, las veces que te quedas agarrado son muy escasas, la experiencia es grande pero falta empuje, ilusión, ganas de verdad, fuerte excitación, agilidad de movimientos y, sobre todo, aguante. Por eso, las veces que te quedas agarrado o que tienes ocasión de engancharte son mínimas, pero la naturaleza es demasiado sabia y hace que te apacigües rápidamente y que no lo eches tan en falta como cuando eras joven o maduro.

Y dicho todo esto...¿en cuál de los tres momentos te encuentras tú?

La Muerte

Cuando eres joven piensas que sólo los demás se mueren, que eso no va contigo, que tú no te vas a morir nunca o, dicho de otro modo, que te falta tanto y tanto tiempo para morirte que no es cuestión ni de preocuparse lo más mínimo, puesto que puede que ese momento ni llegue tan siquiera.

Y no es así. ¿Verdad que no es así?

En cualquier momento, en cualquier segundo de tu vida...ahora mismo, por ejemplo, te puedes quedar con los ojos abiertos, con la boca abierta, mirando al techo y con el corazón más parado y duro que las piedras del camino. ¿Para qué tantas tonterías, entonces? ¿Para qué tanto y tanto incordiar, odiar, gritar, pelear, envidiar, sufrir, desesperarse, perseguir, desilusionarse, hundirse...? ¿Para qué?

Vivamos cada momento de nuestra vida como si la Muerte no existiera, como si todo en la vida consistiera en Vivir y en Vivir Bien. Olvidemos la Muerte. No pensemos en Ella. La Muerte no existe, tan solo es un estado más de lo que, mientras vivimos, llamamos Vida.

En la Vida vas, vienes, subes, bajas, andas, corres, duermes, comes, trabajas, viajas, amas, odias, piensas, sueñas...y mueres. La Muerte es, tan solo, un concepto más de todos esos conceptos que, juntos, conforman nuestra Vida. Tan sólo es eso.

No pienses en ella y disfruta.

Algunos, cierran, y otros...

Algunos portales de blogs están cerrando. Nadie o casi nadie escribe en ellos, y los pocos que escriben o escribimos acabamos, finalmente, por mandarlos a tomar por culo: ¡¡demasiada publicidad emergente. Demasiada mierda impidiendo leer correctamente lo que nos interesa e impidiendo desplazarte con normalidad por los distintos apartados del blog¡¡

Por eso la gente acaba abandonando esos portales y por eso dichos portales acaban cerrando.

Por mí, como si los operan. Lo que no puedo hacer yo es estar quitando constantemente anuncios emergentes de una publicidad que no me importa lo más mínimo: ¡¡Si me quiero comprar algo, ya lo buscaré donde sea, pero no me des la vara con la puta mierda de los anuncios emergentes porque te mandaré a cascarla¡¡

¿Acaso no se dan cuenta los administradores de esos portales que son ellos mismos los que se están enviando al paro?

Cuando Dios no le da a alguien cerebro, le tiene que dar patas.