domingo, 22 de agosto de 2010

¡¡POR FIN...¡¡


Pues sí. Hasta ahora y por distintos motivos no me he podido ir de vacaciones. No he podido disfrutar de unos días en la playa con mi señora y mi perrita. Bueno, miento: A principios del mes de Julio estuvimos 3 días.

Ahora nos queremos volver a marchar, el martes, otros tres o cuatro días. Y con todo eso, vacaciones terminadas y hechas.

Tenemos un pequeño apartamento en la provincia de Castellón y, aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid y que a nosotros nos da la gana de ir, aunque no pasara tal río por tal capital, pues eso, que nos vamos a ir el martes.

El lunes tengo una reunión para preparar una asamblea de socios de la asociación de la que soy secretario, si no fuera por eso, nos iríamos mañana mismo. Pero la obligación manda y, como siempre decía mi abuelo que en paz descanse: Primero, la obligación; después, la devoción.

Mañana me agenciaré un par de buenos libros para leer en el porche de mi apartamento, a la sombra, sentado en el sofá que tenemos allí, saboreando la tibieza de las temperaturas, el silencio que siempre reina en mi urbanización, la buena lectura y una cerveza fresca. Un buen paseo por la tarde, alguna que otra cerveza en algún velador, algo de televisión -no mucha-, y relax total y pleno en compañía de mi señora y de nuestra perrita westy.

Algo contaré a la vuelta. Eso espero.