miércoles, 29 de septiembre de 2010

La huelga y el almuerzo

Ayer me llamaron los amigos por teléfono, a última hora de la tarde, a eso de las siete y media:

- Mañana vamos a almorzar a la casa de campo de...¿Puedes venir?

- ¡¡Por supuesto¡¡ A las 9 de la mañana estoy allí.

Image and video hosting by TinyPic

Y a las 9 de la mañana nos hemos juntado 6 amigos. El día, maravilloso. Apetecía estar al sol. La temperatura no podía ser más agradable. El cielo totalmente despejado...

Hemos empezado a preparar las ensaladas a base de tomate de campo, cebolla de campo, aceite, vinagre, olivas negras...Hemos rellenado la "bota" con vino dulce y el pequeño "tonel" con vino algo más fuerte, con algo más de cuerpo, y hemos empezado a asar las longanizas, el jamón y a preparar los huevos fritos. Nos hemos sentado los seis alrededor de la gran mesa y, con el sol entrando a raudales por la puerta de caserio, hemos empezado a dar buena cuenta de todo mientras hablábamos de todo: de las cosas del campo, del trabajo, de la huelga...Unos melocotones enormes de postre, unos cafés y carajillos y un par de chupitos de hierbas.

Después nos hemos sentado un poco en la calle, en la puerta del caserio, al sol...¡¡se estaba de muerte¡¡ Y cuando han dado las 11 y media, nos hemos marchado para acudir a la manifestación que, a las 12, iba a tener lugar en la Plaza más céntrica de nuestra Localidad.

Del tema de la huelga, mejor no hablar que bastante nos han hablado ya estos días todos los políticos y los no políticos. Lo que tenga que venir, vendrá, y lo que tenga que ser, será. Prefiero hablar, vivir o comentar situaciones de almuerzos y reuniones de amigos que son las que nos provocan los mejores momentos de nuestras vidas. Para lo otro, para el tema laboral o de huelgas, ya tenemos a unos señores que se encargan de "arreglarnos" o "jodernos" la vida, según les interese.

Hemos quedado para dentro de 10 días para hacer otro almuerzo como este. Parece ser que nos estamos acostumbrando y lo estamos tomando como "normal" el tema este de hacer un almuerzo campestre de vez en cuando. No está mal. Estos son los momentos que nos arreglan el cuerpo y la vida y son estos momentos los que no hay que dejar pasar por mucho que llueva.

No hay comentarios: